7 especies animales que nuestros hijos quizás nunca conocerán

Lamentablemente, en algún momento que puede ser dentro de 10 o 20 años, los niños preguntarán por un lince ibérico o un oso polar y tendremos que contarles que los vimos en cautiverio antes de extinguirse completamente, aunque en ese momento no nos detuvimos a pensar que tal vez contemplábamos los últimos de su especie sobre el planeta.
Y es que, desde hace tres décadas, poblaciones enteras de animales han sido desplazadas de sus hábitats o simplemente diezmadas, gracias a la interferencia del ser humano, lo que pone en peligro su existencia y el equilibrio de muchos ecosistemas.

Lince ibérico

El lince ibérico es una de las especies de felinos que está más amenazada en el planeta. A menudo mueren al chocar contra vehículos en las carreteras, son cazados de manera ilegal debido a sus pieles o simplemente sus hábitats son destruidos.
Para colmo, el hombre también ha reducido la población de conejos, la principal fuente de alimentación de estas criaturas, lo que rompe el equilibrio ecológico existente en la naturaleza. Entristece saberlo, pero en la actualidad quedan unos 100 y solamente en la región de Andalucía, España.

Wombat de nariz peluda del norte

El simpático wombat de nariz peluda del norte es un marsupial grande que llega a pesar cerca de 45 kilos. Con su apariencia de peluche que dan ganas de abrazar, uno creería que son lentos. Sin embargo, cuando se asustan pueden alcanzar los 40 kilómetros por hora. La mala noticia es que apenas quedan 100 de ellos y todos concentrados en la reserva natural de Queensland, Australia.

Oso polar

Quién no conoce y ama al oso polar con su blanco pelaje y una imponente figura? Son los carnívoros más grandes del mundo y suelen habitar las regiones heladas del ártico. Pero, como todos sabemos, el deshielo de los polos terrestres amenaza cada día más la existencia de estos enormes plantígrados, que pronto no tendrán hielo firme donde andar en cuatro patas. Incapaces ya de seguir el ritmo adecuado para buscar alimento, es probable que con el tiempo acaben por morir de hambre.

Camello bactriano silvestre (foto)

El camello bactriano silvestre es el que popularmente conocemos como camello, es decir, ese que tiene dos jorobas en su lomo. Estos animales provienen del desierto de Gobi en China y Mongolia. Suelen almacenar agua y alimento en sus gibas.
Pero he aquí que la caza indiscriminada, la minería y el cruce genético con camellos domésticos han reducido considerablemente la cifra de estos animales, que actualmente solo llegan a 1.000 y se prevé que este número baje a mínimos en las próximas décadas. Nuestros hijos tendrán que conformarse con los dromedarios y su joroba única.

Tigre siberiano

El tigre siberiano es la especie de estos animales más grande que haya existido. Pasa que estos felinos son fáciles de domesticar, así que es poco probable que ataquen a los humanos. Como resultado, solo nos quedan unos 250 individuos en el mundo.

Lobo rojo

A pesar de que hace 30 años se pusieron en cautiverio los últimos lobos rojos que existían y se logró aumentar su cifra a 100 en los desiertos del sudeste de los Estados Unidos, la población de esta especie ha vuelto a reducirse considerablemente a causa de la deforestación en la región, que deja sin hábitats a estos hermosos cánidos.

Rinoceronte blanco del norte

Y finalmente, tenemos al rinoceronte blanco del norte, cuyo último ejemplar macho acaba de morir en Kenya, de eutanasia a los 45 años de edad, tras meses de deterioro de su salud en la reserva de animales Ol Pejeta Conservancy. Se llamaba Sudán y su edad era equivalente en proporción a la de un ser humano de 90 años.

De su especie solo nos quedan dos hembras, su hija Najin, de 27, y su nieta Fatu, de 17, que permanecen protegidas las 24 horas en la misma instalación. Con suerte, lograremos emparejar una de las sobrevivientes con el semen del macho fallecido.
Al borde de la extinción, el rinoceronte blanco ha sido cazado por el ser humano históricamente para preparar medicamentos con sus cuernos, pese a que sus propiedades curativas no han sido confirmadas por la ciencia.

La próxima vez que veas alguna de estas especies en un zoológico o en un video en Internet, piensa que son animales que probablemente nuestros hijos nunca conocerán. 

vix