En el mundo existen muchos alimentos que resultan ser muy saludables para los seres humanos, y otros también traen consecuencias. Sobre eso, se ha debatido mucho, por ejemplo, con el ají y sus beneficios y perjuicios en el cuerpo humano.
Se conoce que en América Latina, México es el país con mayor consumo de ají, y se le suma Colombia, que aunque no es pionera en el cultivo y consumo del alimento, cada vez el número de personas que lo comen va en aumento.
En el mundo existen más de 1.000 variedades de ají o chile, como se conoce en otras regiones del planeta, e incluir esta verdura dentro de la dieta traerá muchos beneficios.
En un dato de la Organización Mundial de la Salud-OMS- se ha determinado que la tasa de mortalidad por diferentes tipos de cáncer es menor en países culturalmente consumidores de picante en comparación con otros países con dietas diferentes.
Además, el ají tiene un efecto digestivo, ya que su consumo está relacionado con el aumento en la producción de saliva y jugos gástricos. Diferentes estudios han encontrado que la ingesta de capsaicina (responsable del sabor picante), incrementan el gasto de energía, duplica la producción de calor en las personas y por tanto la quema rápida de calorías, por lo que también es un excelente aliado para bajar de peso.
Otra ventaja es que tiene poder antioxidante, gracias a su contenido de polifenoles y antocianinas, nutrientes que le dan al fruto sus colores vivos. A la capsaicina presente en el ají también se le atribuyen propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas. Por último, el ají aumenta el flujo sanguíneo y se le reconoce por ser afrodisíaco.
KIENYKE
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