En muchos casos, una feliz coincidencia determinó su creación. Sin embargo, también fue importante la insistencia de sus creadores, que se hicieron la pregunta: “¿Qué pasa sí...?”. De esa manera fueron inventados, por ejemplo, un carrito de supermercado, utensilios de teflón y otros artículos, de los cuales no se puede prescindir.
1. Pastel de Kiev
Este popular pastel surgió debido al error del pastelero, que olvidó poner en el refrigerador una mezcla a base de clara de huevo destinada para preparar galleta. A la mañana siguiente, esta preparación se había vuelto seca y firme. Tenían que salvarla de alguna manera.
Por lo tanto, el jefe de la sala de galletas inventó un postre literalmente sobre la marcha. Con la preparación hicieron pasteles, que fueron untados con crema de mantequilla, cubiertos con azúcar en polvo y decorados con adornos. Ese postre fue el precursor del famoso pastel.
2. Galletas con chispas de chocolate
La dueña de un hotel en los EE. UU., Ruth Wakefield, siempre horneaba galletas para sus huéspedes. Generalmente uno era de chocolate y ella agregaba cacao a la masa. Pero una vez se quedó sin el cacao, y Ruth decidió agregar trozos de chocolate a la masa.
Al hornear, el chocolate no se derritió. Resultó ser un postre completamente nuevo: galletas con chispas de chocolate. Muchas gente quedó fascinada con esta creación, y en 1997 incluso se convirtieron en el plato oficial de Massachusetts.
3. Super pegamento
La base del super pegamento, la sustancia cianoacrilato, fue inventada durante la Primera Guerra Mundial como parte de un experimento. Era necesario crear con urgencia un plástico transparente para la mira de un rifle. Sin embargo, la sustancia que inventaron no servía, ya que era terriblemente pegajosa.
La fórmula fue olvidada, pero en 1951 un científico la recordó y entendió que había un gran potencial comercial detrás. Y no se equivocó: el super pegamento es conocido en todo el mundo.
4. Papas fritas
En uno de los cafés de Nueva York, el chef George Crum tuvo un cliente muy caprichoso. No le gustaron las papas fritas caseras que le sirvieron: las rebanadas le parecieron insuficientemente finas y crujientes. Después de varios intentos, el cocinero se enojó y cortó las papas en rebanadas lo más finas posible, literalmente como una hoja de papel, y las puso a freír a fuego alto. El cliente, encantado, pidió ración una suplementaria.
Este plato se agregó al menú del restaurante, la idea fue recogida por otros lugares, y después de un tiempo se empezó la producción de papas fritas.
5. Revestimiento de teflón
Este revestimiento cómodo, gracias a lo cual giramos los panqueques tan fácilmente, apareció... debido a un refrigerador. El químico Roy Plunkett intentó crear un nuevo tipo de gas de clorofluorocarbono. Dejó el recipiente en el refrigerador y al chequearlo después de un rato, vio que el gas se había evaporado. Pero en el fondo quedó una sustancia extraña. Después de estudiarla, el científico se dio cuenta de que podía servir como lubricante sólida.
Al principio el teflón se usaba para fines militares y para la industria. Luego, en el marco de los experimentos, trataron de aplicarlo a sartenes comunes, y la idea resultó ser exitosa.
6. Caucho vulcanizado
El científico Charles Goodyear experimentó con el caucho, mezclándolo con diferentes sustancias, pero no obtuvo ningún resultado interesante. Hasta que finalmente llegó la hora del azufre. Al mezclar las dos sustancias, el científico accidentalmente dejó caer la mezcla sobre una superficie caliente. Resultó el caucho elástico. Habiendo mejorado el método, decidió patentarlo (en 1844). El nombre que eligió no fue por casualidad, y llamó al caucho “vulcanizado” en honor a Vulcano, el dios del fuego en la antigua Roma.
7. Carrito de supermercado
El propietario de una tienda en Oklahoma City, Sylvan Goldman, en 1936 notó que los compradores abandonaban la tienda cuando su canasta de compras era demasiado pesada, incluso si no habían comprado todo. Notó que una de las clientas puso su canasta pesada en el auto de juguete que empujaba su hijo.
Al principio, Goldman inventaba el diseño, colocando la canasta en una silla, y luego pidió ayuda a los ingenieros; así fue creado el primer carrito de compras.
8. Fósforos
El farmacéutico inglés John Walker estaba preparando en 1826 una de las mezclas farmacéuticas. Revolvía el líquido fosfórico con un palo fino de madera. Cuando una parte de la mezcla se quedó en la punta, trató de sacarla frotándola contra un muro de piedra. El palito de repente se prendió fuego.
Al desarrollar el invento, Walker comenzó a vender fósforos en su farmacia. Al principio los fabricaba de cartón; luego, viendo que no era muy conveniente, reemplazó los palitos de cartón por unos de madera, y comenzó a venderlos junto con un trozo de papel de lija.
9. Colorante artificial
Los tintes brillantes, que ahora se usan literalmente en todas partes, deben su nacimiento al químico William Perkin, quien en 1856 intentó inventar una cura para la malaria. El remedio “no sirvió”, pero el científico descubrió que la masa obtenida, de un color púrpura muy hermoso, era más brillante que cualquier tinte natural, no perdía el color y no se lavaba.
El tinte púrpuro natural en ese momento era increíblemente caro, porque el material para su producción eran las conchas de caracoles especiales, y se requería muchos de ellos para obtener una pequeña cantidad de tinte.
10. Cámara web
En los años 90 del siglo XX, entusiastas informáticos de Cambridge inventaron una cámara web solo por pereza. Sí, los chicos no tuvieron ganas de ir y chequear si había café en la máquina que podían usar todos los empleados.
Varias veces al día la cámara tomaba 3 fotos rápidas, ya que el prototipo de la cámara web moderna no podía filmar un video. A partir de estas fotos se podía saber si había café en la máquina, y quién había tomado la última taza sin llenar la máquina con agua. Se ha conservado la última foto realizada por esta cámara.
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