Un estudio publicado en Diabetes Care, la revista de la Asociación Americana para la Diabetes, calcula que una de cada tres personas que padecen de diabetes no lo sabe. Así de difícil es diagnosticar esta enfermedad: como la diabetes es una enfermedad de evolución gradual, obtener un diagnóstico precoz es muy difícil. Por eso, es importante mantenerse atenta a las señales de la prediabetes, el período anterior al establecimiento de la enfermedad, para prevenir las futuras complicaciones.
Entre los riesgos que presenta esta seria enfermedad, se encuentran, según la reconocida Mayo Clinic, enfermedades cardíacas (incluido el accidente cerebrovascular), daños a los nervios (pérdida de la sensibilidad), enfermedades de los riñones, deterioro ocular y auditivo, flujo sanguíneo insuficiente hacia los pies, enfermedad de Alzheimer y depresión.
Si estás en uno de estos grupos, tienes mayor riesgo de diabetes
De acuerdo a la Mayo Clinic, las personas que poseen una historia familiar de diabetes pueden correr más riesgo de padecerla. El hecho de que tu madre haya padecido diabetes gestacional mientras estabas todavía por nacer aumenta las chances, para ti y para ella, de desarrollar diabetes más tarde.
Este problema de salud está más relacionado al peso y a la alimentación de lo que crees. No solo un exceso de azúcar (los refrescos son la principal fuente) puede inducir la enfermedad, sino que otros hábitos alimenticios también pueden ser culpables: consumir carnes rojas y carnes procesadas está asociado con un mayor riesgo de prediabetes. En cambio, comer más frutas, vegetales, frutos secos, granos integrales y aceite de oliva (es decir, seguir la dieta mediterránea) está relacionado con un menor riesgo.
El sobrepeso (y, obviamente, la obesidad) también puede ser un factor de riesgo para la diabetes. El tamaño de la cintura es importante: el riesgo de desarrollar resistencia a la insulina aumenta en hombres con una cintura de más de 100 cm de circunferencia y en mujeres con una de más de 90 cm. Las células se volverán cada vez más resistentes a la insulina cuanto más grasa acumules entre el músculo y la piel que rodean el abdomen.
La prediabetes no suele presentar síntomas. De todos modos, antes de que la diabetes se instale por completo, puede que se hagan presentes algunos de los síntomas de la enfermedad, de manera mucho más sutil. Sin embargo, esto puede no ser la regla para todas las personas.
Hay algunos síntomas que sugieren la evolución de la prediabetes a la diabetes. Uno de ellos, según la clínica, es el oscurecimiento de la piel en ciertas partes del cuerpo. Estas pueden incluir el cuello, las axilas, los codos, las rodillas y los nudillos. Además, puede haber un aumento de la sed, una necesidad mayor de orinar, fatiga excesiva y visión borrosa.
Para tener la certeza de que tienes prediabetes, es necesario que visites al médico; allí, si tu preocupación tiene fundamento, te harán exámenes para determinar tu nivel de glucosa en sangre.
En caso de que te diagnostiquen la dolencia, la prevención es el mejor tratamiento para evitar la evolución de prediabetes en diabetes. Para eso, en necesario adoptar nuevos hábitos alimenticios, más saludables, restringiendo el consumo de azúcar, carbohidratos simples y otros alimentos procesados, además de reducir el número de calorías consumidas, en caso de que adelgazar sea una opción para la prevención de la enfermedad. Hacer ejercicio regularmente es una buena forma de escapar de esta complicada enfermedad.
vix
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