Con
el Fin de Año los espumosos tienen uno
de los momentos más álgidos de su oferta. Las fórmulas cambian, muchas se
ayornan pero su esencia festiva se
preserva.
Y
es que para cualquier brindis no pensamos si no en contar con espuma en la copa
y que los cristales suenen al chocar.
Por
ello no quiero pasar si dejarles tres recomendaciones para compartir y degustar
cuando las campanas tañen las doce.
Para
los osados y ávidos de probar un exponente de la vieja guardia sumándose a la
revalorización de una cepa típica mendocina sugiero Chaman Semillón Extra Brut
2017. Una cepa que rara vez es usada para hacer burbujas.
Espumoso
de gran personalidad, de aspecto oleoso y pesado en copa donde se destacan los damascos, duraznos y la miel.
Sutil
y elegante sabiduría chamánica hecha brebaje con método champenoise.
El
segundo en la lista es una apuesta atrevida y fresca. Tordillo 2017 es un
espumoso elaborado con una mezcla de uvas blancas, que al igual que el pingo
homónimo mostrará una tonalidad distinta en su composición.
Aquí
el Enólogo Pepe Reginato propone el juego con Semillon , Chardonnay y Sauvignon Blanc logrando un espumoso joven
con un agradable equilibrio entre la fruta y los aromas de levadura. Es muy
sabroso, con las burbujas muy bien integradas.
Otra de las grandes propuestas del Relator Wines de Fernando “Flaco”
Gabrielli.
Por
último para los amantes de uno de los clásicos componentes de la champaña les
propongo Claroscuro Extra Brut Pinot
Noir. El arte de ésta uva plasmada en pinceladas de color rosadas tenues.
Refrescante
botella de aromas frutados y florales, de carácter joven y una atractiva
complejidad de aromas y sabores.
En
definitiva, ese intercambio de deseos que provocamos al levar la copa siempre
se hará con una columna de burbujas serpenteando desde el fondo del cristal y
se materializarán en la alegre frescura que entrega en boca un espumoso.
Dario Le Bihan
Sommelier Comunicador
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