Estamos seguros que en alguna ocasión has oído sobre el ácido úrico. Tal vez te hayas realizado un análisis de sangre y te haya salido el valor de ácido úrico en sangre alto. Debes saber que es una sustancia química que es generada por tu propio cuerpo cuando procesa las purinas, unos elementos que están presentes en ciertas bebidas y alimentos.
Por tanto, unos niveles elevados de ácido úrico pueden tener efectos negativos en tu salud. Por este motivo, es muy importante tener unos valores correctos o reducirlos en caso de estar por encima de lo recomendado.
Por definición: el ácido úrico es una sustancia que crea el cuerpo humano al metabolizar o descomponer las purinas. Se presenta como microscópicas escamas blancas compuestas de hidrógeno, nitrógeno, oxígeno y carbono. Cuando la cantidad aumenta en exceso, puede producir dolencias como cálculos renales o la gota.
Algunas células de nuestro organismo pueden producir las purinas (endógeno) o bien se introducen en nuestro cuerpo mediante la ingesta de ciertos alimentos o bebidas (exógeno). El ácido úrico se disuelve en la sangre hasta que llega a los riñones, órganos donde se filtra mediante su función excretora. Posteriormente se elimina mediante la orina. En este punto, tal vez te guste saber qué es la cistitis.
Qué sucede cuando los niveles de ácido úrico en sangre son más altos de lo normal?
El problema ocurre cuando la cantidad de ácido úrico que tiene el cuerpo es demasiado elevado y los riñones no son capaces de poder eliminarlo completamente del torrente sanguíneo. Es entonces cuando el nivel alto de esta sustancia química puede suponer un inconveniente para tu salud. Tener el ácido úrico alto en sangre se denomina en términos médicos como hiperuricemia.
Los valores normales de ácido úrico en sangre para las mujeres se encuentran entre 2,5 y 6,0 mg/dL. En cambio, en los hombres los niveles adecuados oscilan entre 3,4 y 7,0 mg/dL.
La principal consecuencia es la acumulación en forma de cristales microscópicos de ácido úrico en las articulaciones, provocando inflamación y fuerte dolor. Es lo que popularmente se conoce como la gota.
Los ataques de gota suelen caracterizarse por ser muy dolorosos. Por este motivo es sumamente importante mantener los niveles dentro de los que se considera valores normales de ácido úrico.
Por norma general, un tercio del ácido úrico que corre por tu cuerpo procede de la ingesta de alimentos y las otras dos partes las genera el propio metabolismo. Por lo que es fácil deducir que un exceso de ácido úrico puede ser consecuencia de:
Tener una mala alimentación (exceso de alimentos ricos en purinas)
Exceso de producción por parte del cuerpo humano
Defecto o alteración a la hora de eliminarlo del cuerpo.
Síntomas del ácido úrico alto
Lo primero que debes saber es que si una persona tiene el ácido úrico alto, necesariamente no tiene por qué mostrar síntomas. Lo que sí puede ser consecuencia directa de esta dolencia es tener ataques de gota: una acumulación de ácido úrico en forma de cristales diminutos en las articulaciones.
Es más, si no se toman medidas ni tratamientos para la gota, dichos cristales se van a seguir acumulando, llegando a formar incluso una especie de bultos duros alrededor de las articulaciones y que se denominan tofos gotosos o tofos gotáceos.
También es posible que surjan problemas o trastornos renales. Principalmente causados por la formación de cálculos renales en los riñones debido a tener un nivel de ácido úrico elevado. Lo que comúnmente se denomina “tener una piedra en el riñón”. Esta dolencia puede provocar fuertes dolores, sobretodo cuándo los cálculos o “piedras” empiezan a bajar por el uréter hacia la vejiga.
En este punto cabe destacar que, normalmente, los hombres tienen más posibilidad de tener alto el ácido úrico. Del mismo modo, también las personas que consumen elevadas cantidades de alcohol o tengan antecedentes en su familia de gota.
Causas del ácido úrico alto
Como hemos comentado anteriormente, un tercio del ácido úrico que existe en el cuerpo humano proviene del consumo de alimentos y bebidas ricas en purinas. Los otras 2 partes las genera el propio cuerpo de forma natural. Por ello, las principales causas de tener un nivel de ácido úrico elevado son:
Consumo de alcohol: a más ingesta mayor riesgo
Obesidad y sobrepeso
Deficiente eliminación del ácido úrico en los riñones
Ciertos medicamentos pueden provocar un exceso de producción de ácido úrico
Alimentación deficiente:
Consumo excesivo de embutidos y carnes rojas
Demasiado marisco y ciertos pescados en la dieta
Exceso de ciertas legumbres, como los garbanzos y las lentejas
Demasiado consumo de espinacas, coliflores, espárragos, puerros, champignones o rábanos
Consumo excesivo de productos con fructosa añadida
Tratamiento para el ácido úrico alto
Para poder determinar el nivel de ácido úrico se debe realizar un análisis de sangre. Éste nos indicará exactamente si el valor es elevado y, en ese caso, se requiere de un tratamiento para bajar el ácido úrico.
Normalmente, el remedio que determine el doctor comportará algunos cambios en los hábitos alimenticios del paciente (dieta). Del mismo modo, también es posible que el médico recete algún tipo de medicamento para regular esta sustancia que está fuera de rangos normales.
Dieta para el Ácido Úrico Alto
Si tienes que bajar el nivel ácido úrico que tienes en sangre, lo primero que se debe conseguir es bajar el pH de la orina (en términos médicos se denomina bajar la basicidad de la orina). Con esto se consigue favorecer la eliminación natural del exceso de ácido úrico que hay en el torrente sanguíneo.
Debes evitar los alimentos que sean ricos en purinas. Debes también disminuir la ingesta de alimentos a acidificantes. Esto es:
El pescado azul y el blanco
Las carnes rojas y blancas
Embutidos
Los cereales y sus derivados (pan, arroz, pasta, maíz y harinas)
alimentos a evitar con ácido úrico
Evita comer embutidos si tienes el ácido úrico elevado
En cambio, debes ingerir más alimentos denominados basificantes. Esto es: verduras, legumbres, frutas, tubérculos y hortalizas.
A continuación te ofrecemos una lista de alimentos con la cantidad de purinas que contienen por cada 100 gramos. De este modo puedes evitar la ingesta de los que cuentan con un contenido más alto:
Entre 150 y 800 mg de purinas por 100 g.: embutidos, marisco, patés, pescado azul de pequeño tamaño y vísceras
Entre 70 y 150 mg de purinas por 100 g.: carnes de caza, lentejas, pescado azul de gran tamaño y carnes rojas
Entre 50 y 70 mg de purinas por 100g.: soja, setas, espárragos, judías blancas, coliflor, espinacas, garbanzos, guisantes y las carnes magras o blancas
Entre 0 y 50 mg de purinas por 100g.: frutas y resto de verduras no nombradas con anterioridad, raíces, lácteos, cereales refinados (sin salvado ni germen).
No comer marisco para evitar tener el ácido úrico alto.
En cualquier caso queda prohibido el consumo de bebidas alcohólicas y cocinar con muy poca sal o ninguna. Debes también beber por lo menos 2 litros de agua al día y comer muchos vegetales.
Si lo prefieres, puedes tomar infusiones o té de plantas como la cola de caballo o la ortiga verde. Estos brebajes están muy recomendados para bajar el ácido úrico elevado y aumentar la diuresis de los riñones.
También son especialmente recomendables algunos alimentos como por ejemplo: la manzana, las zanahorias, el limón y los puerros.
Si padeces de algo de sobrepeso y tienes el ácido úrico alto, es muy recomendable comenzar a realizar ejercicio de manera regular y de forma suave. Puedes ver nuestro artículo Por qué duele la cabeza al hacer ejercicio y cómo evitarlo.
Personas propensas a tener ácido úrico elevado
Existe un patrón establecido en la que se puede observar qué personas son más propensas a tener el ácido úrico alto. Entre ellas podemos encontrar:
Consumidores habituales de alcohol
Personas del sexo masculino
Tener antecedentes familiares de tener gota
las bebidas alcohólicas malas para ácido úrico
Del mismo modo, se conocen varios elementos que propician claramente el aumento de los niveles de ácido úrico en sangre. Como por ejemplo:
Tener la tensión alta
El consumo de cafeína
Obesidad
Sufrir estrés
Tener diabetes
El empleo de contrastes radiológicos iodados
Padecer dislipemias
Te recordamos que este artículo es solo informativo.
curiosfera
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