Tras perder 'in extremis' en el Mundial de Rusia 2018, la Selección de Japón limpió el vestuario y dejó un mensaje de gracias.
Así de limpio y con ese cartel de 'gracias' dejaron los japoneses el vestuario tras su eliminación del Mundial de Rusia 2018.
No van a ganar la Copa del Mundo, porque los japoneses se apearon de la competición el lunes, cuando perdieron 3-2 contra Bélgica, pero han dado una lección de educación y civismo que ha dado la vuelta al planeta y que quedará en la historia de los Mundiales de fútbol.
Los asiáticos dieron una lección de pundonor contra Bélgica. Llegaron a ponerse 0-2. Y llegaron al tiempo añadido con empate. Pero este deporte, a veces, es cruel. En el minuto 94, en una contra, les marcaban el tercero y quedaban fuera del Mundial de Rusia 2018.
Los jugadores se dirigieron hacia su hinchada y les aplaudieron antes de entrar a las duchas y a asimilar que les habían dado la puntilla cuando estaban a punto de colarse entre los ocho mejores países del mundo de este deporte.
Una vez dentro y habiéndose aseado, limpiaron el vestuario. Algo que sorprende, pero que, viendo cómo sus seguidores se llevaban toda la basura que habían generado de la grada, no es más que una muestra de la educación de su cultura.
Pero eso no es todo. Decidieron dejar un cartel con una única palabra: gracias. La misma que deberíamos dedicarles todos los amantes de este deporte. Porque, gracias a ellos, desde el lunes, el fútbol es un espectáculo mucho mejor.
mujer hoy
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