La pérdida de un diente tiene más consecuencias en nuestra salud de las que a priori podemos pensar. Muchas personas lo asocian únicamente a un aspecto físico o un capricho en aquellos casos que no resulta del todo visible.
Pero, cuales son las razones para recurrir a un implante dental?
Lo cierto es que la caída de un diente puede convertirse en una pesadilla para cualquier persona, ya sea por estética o por salud. De hecho, son ambos factores los que se ven afectados incluso cuando se ha producido la perdida de un sólo diente. El problema llega cuando no se pone remedio a corto plazo, ya que sus consecuencias se van agravando, afectando al hueso y dientes de alrededor.
A continuación vamos a dar algunas de las razones principales por las cuales debemos de acudir a un dentista para solucionar la caída de un diente:
– Estética:
La razón más evidente y a la que los pacientes suelen dar más importancia. El aspecto físico puede afectar directamente a nuestras relaciones sociales y laborales, y la caída de un diente influye negativamente. Además solucionar la pérdida de un diente mejorará la autoestima y ayudará a llevar una vida más satisfactoria.
– Efectos negativos sobre el hueso:
Uno de los problemas que se generan cuando no se pone remedio a la pérdida de un diente es que las encías tienden a alejarse, produciéndose la pérdida del hueso. Cuanto más tiempo pase peores consecuencias, llegando a afectar a los dientes de alrededor hasta el punto de provocar su caída.
– Cambios en la estructura facial:
Los dos aspectos anteriores se relacionan directamente, ya que al contraerse la encía y verse afectados los huesos maxilares se refleja en la forma de la cara. La consecuencia es un aspecto más envejecido.
– Separación dental y carga sobre otros dientes:
A la hora de realizar la masticación, la falta de un diente implica que ya no sea perfecta afectando directamente a los dientes de alrededor. Además de producirse sobrecargas en estos dientes la encía va perdiendo fuerza incrementándose así las posibilidades de perder más dientes.
La solución: Implantes dentales
Los implantes dentales han demostrado hasta el momento ser la mejor solución ante la caída de un diente. Mediante un proceso mínimamente invasivo se sustituye la pieza dental por un implante logrando así una solución eficaz y con un aspecto bastante natural.
Dependiendo de las necesidades del paciente en función del número de dientes afectados y el estado del hueso el implantólogo determinará cómo enfocar el tratamiento.
desdelaweb
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