Lamentablemente, el machismo sigue estando presente en nuestra sociedad. Aunque cada vez hay más concientización al respecto, todos somos vulnerables a reproducir conductas que afectan la igualdad de género. Los micromachismos son prácticas pequeñas que pudieran parecer inofensivas, pero en realidad fomentan el machismo. Es hora de cambiar algunas costumbres.
#1 Creer que todas las mujeres deben ser madres
Una creencia arraigada es pensar que una mujer se realizará plenamente hasta convertirse en madre. Esto es un completo mito que debemos dejar de repetir.
Cualquier ser humano debe convertirse en padre o madre sólo porque así lo desea y no por presión social. Hay mujeres que desean vivir sin tener hijos y eso es completamente aceptable.
#2 Pensar que una mujer debe saber cocinar
Muchas mujeres han escuchado la típica frase «¿Y qué vas a hacer cuándo te cases?», después de admitir que no saben -o no quieren- cocinar. Esto no le pasa a los hombres.
Esto perpetua la idea de que una mujer debe estar dedicada de manera obligatoria a las labores del hogar, aún cuando también ejerza su vida profesional.
#3 Juzgar a una mujer por su forma de vestir
Las mujeres son libres, como cualquier hombre, de vestirse como quieran. Es común que un día decidan usar pantalón, pero en otros se inclinen por un vestido o falda.
Jamás debemos asumir sus características como persona por cómo se viste. Lo que lleva no dice nada de su calidad como ser humano, simplemente está ejerciendo su derecho a vestir como desee.
#4 Creer que los hijos son sólo responsabilidad de la mujer
Probablemente conozcas a una pareja heterosexual donde la mujer es la única que sabe las necesidades de sus hijos. No es poco común que los hombres no conozcan los hábitos de sus propios descendientes.
Esto pasa porque durante mucho tiempo se ha creído que los hijos son sólo responsabilidad de la madre. La realidad es que un asunto que compete a ambos padres.
#5 Decir que una mujer no puede ser brillante
Durante mucho tiempo se ha creído que las mujeres no tienen la misma capacidad intelectual que los hombres. Y mucho menos sí son mujeres consideradas bonitas.
La realidad es que no hay un género más capaz que otro. Es momento de dejar atrás esas creencias de que las mujeres son seres inferiores a los hombres.
#6 Las mujeres no deberían beber o fumar
Quizá hayas escuchado la frase «Que fea se ve una mujer fumando». Se piensa que el sexo femenino debe seguir los estereotipos que se le han atribuido.
Estos son verse siempre perfectas, no romper las reglas sociales, tener siempre buena actitud, entre otras. Sabemos que fumar y beber no son prácticas saludables, pero las mujeres están en su derecho de hacerlo.
#7 Pensar que una mujer debe sonreír siempre
Se piensa que las mujeres deben mantener una actitud siempre positiva ante los demás y eso incluye tener una sonrisa en todo momento. Incluso le pasó a la gimnasta Simone Biles.
Cualquier persona debe tener la libertad de mostrar sus sentimientos sólo cuando ella lo desee. Las mujeres no tienen porqué mantener una postura para agradar a los demás. Además, es prácticamente imposible sonreír todo el tiempo, ¿o no?
#8 Asumir que todas las mujeres son superficiales
Los medios de comunicación han creado un prejuicio muy dañino. Durante mucho tiempo nos hicieron pensar que la mayoría de las mujeres son superficiales y banales, y sólo unas cuantas se salvan de esto.
Es machista clasificar a las mujeres en una sola categoría. Cada una es diferente y piensan de maneras muy diversas. No cometas el error de juzgar a una persona sin antes conocerla.
#9 Considerar que las mujeres no disfrutan del sexo
También se ha pensado que los hombres piensan todo el día en sexo. Obviamente esto es sólo un mito, al igual que creer que las mujeres no disfrutan del sexo.
De hecho, las mujeres pueden llegar a sentir más orgasmos en una misma relación sexual en comparación con los hombres. El clítoris es un órgano femenino cuyo única función es dar placer.
#10 Explicarle algo a una mujer cuando no te lo ha pedido
Muchas mujeres se sienten molestas cuando un hombre les explica algo que no solicitaron (y peor aún si ellas dominan ese tema). Esta práctica es tan común, que ya se le ha dado un nombre: mansplaining.
Quizá para ti sea inofensivo, pero cuando lo haces, estás asumiendo que las mujeres saben mucho menos que tú. Compartir lo que sabes no es malo, pero será mejor preguntar antes de hacerlo.
#11 Minimizar la violencia de género
Lamentablemente, la violencia de género es un tema que no ha disminuido con el tiempo, sobretodo en Latinoamérica. Tan sólo piensa que en México, cada día nueve mujeres son asesinadas por motivos de género.
Tal vez digas que a los hombres también los matan y eso es completamente cierto. Sin embargo, las estadísticas muestran que muchos hombres mueren por estar involucrados en actividades ilegales. Quienes son asesinados sin ninguna culpa, como en un asalto, mueren a manos de otros hombres.
#12 Suponer que una mujer soltera es infeliz
Son muchas las mujeres a las que les han dicho que «se van a quedar para vestir santos» o se convertirán en solteronas si no encuentran una pareja pronto. Por lo general, esto ocurre cuando han pasado de los 30 y no se han casado.
Considera que la mayoría de las mujeres solteras lo están porque así lo desean. Quizá aún no hayan encontrado a la persona indicada, o simplemente se sienten mejor al no tener una pareja. Y eso no tiene nada de malo.
#13 Limitar las capacidades de las mujeres
A veces podemos creer que las mujeres no son capaces de hacer tantas cosas como los hombres, de tal suerte que no se les encomiendan tareas que son consideradas para hombres.
Debes saber que los tiempos han cambiado y las mujeres se involucran más en diversas tareas. Tenemos que deshacernos de los estereotipos de género y tener una mente más abierta.
#14 Burlarse de un hombre que cumple con su rol de padre
Algunos hombres, y también mujeres, suelen burlarse de sus amigos o conocidos cuando estos deciden quedarse en casa o realizar una tarea doméstica, incluyendo cuidar a sus hijos.
Como ya dijimos, los hijos son responsabilidad de ambos padres. Un hombre que se encarga de ellos no es más ni menos que otro, simplemente está cumpliendo con sus obligaciones y disfrutando de la paternidad.
#15 Juzgar a una mujer por su vida sexual
Aunque se ha progresado en muchas conductas machistas, hay una que aún prevalece. Es el juzgar a una mujer por cómo lleva su vida sexual.
Lo peor es que se les critica tanto a las mujeres que no han tenido ninguna pareja sexual, como a las que ya han tenido varias. Las mujeres y los hombres tienen el derecho de llevar su vida sexual como lo deseen, siempre y cuando no afecten a terceras personas.
#16 Decir que 'ayudas en las tareas de casa'
Esta conducta es una de las más clásicas. Quizá hayas dicho o sólo escuchado a un hombre que menciona que él siempre ayuda con las tareas del hogar, como cocinar, limpiar, hacer las compras, entre otras cosas.
Pero no es una "ayuda", es en realidad su responsabilidad, pues él también vive ahí. Las mujeres no deben ser las únicas encargadas de llevar el hogar.
#17 Priorizar la carrera profesional del hombre
Cada vez es más frecuente que en una pareja heterosexual ambos lleven su vida profesional. Sin embargo, en ocasiones se suele poner la carrera del hombre sobre la de la mujer.
Si por alguna razón alguien debe dejar de trabajar, suele asumirse que es la mujer quien deberá poner en pausa su carrera. Esto es también un micromachismo, pues ambos géneros tienen el derecho de desarrollarse en su profesión.
#18 Pensar que una mujer sólo puede superarse por medio del sexo
Tanto hombres como mujeres llegan a hacer comentarios sexistas y machistas hacia sus compañeras de trabajo. Por ejemplo, se dice que una mujer sólo subió de puesto porque le ofreció sexo a cambio a su jefe.
Además de estar basado en mentiras, esto perpetúa la idea de que una mujer no puede superarse profesionalmente por sus méritos propios. Evidentemente, esto es falso.
#19 Asumir que es el hombre quien siempre pagará la cuenta
Es probable que ya te hayas dado cuenta que los meseros de los restaurantes suelen llevar la cuenta al hombre y no a la mujer. De esta manera, asumen que serán ellos quienes paguen.
Sabemos que cada vez es más común que hombres y mujeres se dividan la cuenta y paguen la mitad. De hecho, a las mujeres también les gusta invitar la cena de vez en cuando.
#20 Humillar a un hombre cuando llora
Decir que los hombres no lloran es una total mentira. Todos somos seres humanos y nos enfrentamos a situaciones que pueden afectarnos notablemente.
Los hombres también necesitan desahogarse o expresar su sentir. Llorar no te hace más ni menos hombre, es simplemente una respuesta natural del cuerpo.
#21 Decir que las mujeres son siempre enemigas
Existen muchos refranes o dichos que ejemplifican este micromachismo. Algunos son: «Mujeres juntas, ni difuntas» o «La peor enemiga de una mujer es otra mujer».
Las mujeres no tienen porqué ser enemigas. Al contrario, pueden lograr muchas cosas juntas y no es casualidad que casi todas las mujeres tengan una mejor amiga. La sororidad (solidaridad entre mujeres) está cada vez más presente en el mundo.
#22 Culpar a las víctimas de agresión
Estamos conscientes de que las agresiones sexuales y físicas hacia las mujeres siguen siendo, tristemente, un tema de todos los días. Pero no es culpa de ellas.
No importa si la víctima salió de noche, tomó alcohol o se vistió de cierta forma. El único culpable de la violencia es el propio agresor, no quien la sufre. Además, hemos visto que estas agresiones suceden a cualquier hora del día y sin importar las condiciones de la víctima.
#23 Decirle a las mujeres cómo deben lucir
Durante décadas se les ha dicho a las mujeres cómo deben verse. Se dice que tienen que estar siempre depiladas, peinadas, con maquillaje, entre otras cosas.
Pero nadie tiene derecho de decirle a alguien más cómo llevar su imagen física. Cada quien decide que prácticas incluir para llevar su apariencia física.
#24 No encarar las conductas machistas de tus amigos
Como ya se dijo, el machismo sigue presente en la actualidad. Así que no es raro que conozcamos a alguna persona que aún lleve a cabo prácticas machistas.
Si queremos lograr un cambio, debemos enfrentar a las personas que lo hacen, sobretodo si son allegados a nosotros. Así crearemos conciencia sobre el daño que genera el machismo.
#25 Interrumpir a una mujer mientras habla
Esto suele pasar frecuentemente en los lugares de trabajo. Las opiniones de los hombres son puestas por encima de las expresadas por mujeres y esto no es correcto.
Las mujeres tienen la misma capacidad intelectual que los hombres. Por lo tanto, sus ideas merecen el mismo respeto y deben ser escuchadas de igual manera.
BBC
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