Guillermo del Toro se llevó el Oscar no sólo como Mejor Director por La forma del agua, también como Mejor Película. Aquí te damos algunas razones por las que el mexicano fue ganador.
Su narrativa
La forma del agua no sólo es una película brillante sino emocionante e inesperadamente sexy. El mensaje de la cinta es sobre amor y ver más allá del exterior. Es una película que se trata de igual forma de encontrar tanto la amistad como a ese verdadero amor.
La cinta se cuenta desde la perspectiva de una mujer adulta que es rescatada por un ser extraño y gracias a lo qué le provoca, el personaje principal logra salirse de su monotonía y recobrar el significado de su vida a partir de que lo conoce. De un ser desconocido que es distinto a todo lo demás.
Como en El espinazo del diablo o El laberinto del fauno, Del Toro utiliza muchas referencias en sus películas, se basa en películas viejas, libros o cómics, arquetipos míticos y su imaginación visual.
La fotografía
Esto es algo que no le ha fallado a Del Toro, visualmente la mayoría de sus películas son impecables. La forma del agua se disfraza de una cinta clásica de Hollywood, pero tiene una enorme sofisticación visual que puede considerarse como una obra de autor.
Tanto en El espinazo del diablo (2001), como en El laberinto del fauno (2006), el director demostró ser mucho más que un realizador de género, de películas visualmente atractivas y bien contadas.
Sus personajes
Del Toro tiene un fanatismo por lo gótico y los monstruos, algo que tal vez en el pasado lo mantuvo alejado del Oscar hasta ahora. Pero, en La forma del agua, sus personajes traen mucho más drama a la historia, tensión, humor, y grandes actuaciones.
Desde niño, el mexicano ha reconocido que le han fascinado por seres deformados de la figura humana, una especie de cosmología que para él es un autentica belleza y funciona como estas criaturas controlan sus miedos y deseos. Para él la verdadera monstruosidad está en los hombres y no en la apariencia de quienes se ven distintos, no importa si son seres insólitos o deformes.
El monstruo en sus películas simboliza lo que es desconocido, lo que nos intimida, pero el reto es empezar a conocerlo y a relacionarnos con él pues es ahí donde al final somos en lo que nos convertimos.
Diseño de arte
La paleta de colores en sus películas, sobre todo por La forma del agua destaca por el turquesa, que le da cierta elegancia a la película. Se ubica particularmente en los apartmentos de Elisa y Giles y añade elementos que favorecen una atmósfera que se disloca de lo real.
La forma del agua está hecha con colores vívidos y muchas sombras. Su argumento se mueve con velocidad pero también se detiene para mostrar momentos de amor y ternura.
VIX
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