En toda relación es común que existan conflictos y discusiones, sin embargo, si estos no se resuelven pueden ocasionar daños a largo plazo.
Las parejas pueden salvar su relación si se detecta previamente las señales de advertencia.
Crítica: Cuando se realizan este tipo de comentarios sobre la personalidad o forma de actuar de tu pareja es muy perjudicial para la relación, ya que tu compañero se puede sentir atacado o menospreciado.
Es uno de los venenos más comunes en cualquier relación, y se debe estar alerta.
Desprecio: Las respuestas como el sarcasmo, los insultos, las burlas y la ridiculización pueden verse “inofensivas”, sin embargo, estas expresiones pueden llegar al conflicto entre ambos.
Es uno de los tóxicos más fuerte para el fracaso de la relación, ya que se alimenta específicamente de los pensamientos negativos que se tienen guardados por mucho tiempo.
Mantener la guardia: Cuando una persona en la relación se siente atacada es normal que su principal reacción sea resguardar sus sentimientos, estallar de ira o alejarse de ella. Esta acción se realiza instintivamente para evitar que su compañero lo vea como un ataque.
Silencio: Cuando la persona no puede combatir con los anteriores problemas de la relación optan por no dar ningún tipo de respuesta a su pareja.
Al dar la espalda o pretender estar ocupada para no tratar o resolver la discusión, genera que la persona se sienta cansada físicamente además que se tiende a guardar rencor.
Estos cuatro problemas son los más comunes en cualquier relación, pero también por culpa de ellos se generan muchas separaciones.
Hablar de tus sentimientos o molestias puede perjudicar la relación si siempre se incluye a la pareja. Para evitar ello es importante utilizar el pronombre “Yo”, háblale de tus pensamientos sin incluirlo.
Evita siempre ver el lado negativo de tu pareja, ya que todos lo tenemos. Trata de ver sus características positivas y aprecia todos los gestos que haga, demostrando agradecimiento y cariño.
Cuando se está en medio de una discusión evita dejarte llevar por la ira, trata de razonar su punto de vista y también explica el tuyo. Si estás equivocado, acéptalo.
Trata de tener por lo menos 20 minutos alejado de la discusión para reducir el ritmo cardíaco. No trates de huir de él, solo toma un momento para leer un libro o simplemente salir a caminar.
Habla con tus amigos o familia acerca de tus problemas de pareja, sus consejos pueden ayudar, además que conversar de ello puede ser beneficioso.
Fuentes varias
0 comentarios:
Publicar un comentario